En este artículo voy a dejarles algunos conceptos de la fitomedicina que son útiles para identificar aquellas plantas y sus partes componentes que nos orienta en la terapéutica cuando existe necesidad de alguna alternativa a los tratamientos médicos tradicionales.
Uno de los principios que me ayuda, a mi, a organizarme, es el de similitud, es decir, si la persona tiene un problema circulatorio, le sirven aquellas plantas cuyo medio o sustrato, es rico en humedad y son acuáticas, ya que estás deben evitar acumular en su estructura, excedentes no deseados, por tanto, son buenas para drenar o dejar fluir los líquidos por su estructura.
Si la persona tiene exceso de peso es recomendable que use plantas cuya estructura sea de eficiente aprovechamiento de los escasos nutrientes que su medio le brinda.
En el caso de problemas oseos y dolores en general, que se producen por infección e inflamación, sirven las plantas que desintoxican, siendo aquellas de sabor agrio, y las partes, que transportan la saliva por la estructura de la planta evitando estancamientos.
Para los trastornos digestivos, usar las plantas que son astringentes, cuyas partes son hojas y semillas, o bien cáscaras, ayudan a desintoxicar o evitan espasmos.
Las partes de las plantas como flores y cortezas, ayudan a la inmunización en el caso de las últimas y a la regeneración en caso de las primeras, pueden tener función cosméticas para uso externo o función medicinal para consumo interno.
Los sustratos y las partes componentes de las plantas se entienden por el principio de similitud con el cuerpo humano o la parte que presenta necesidad de asistencia.
El principio básico de salud deriva de la capacidad de mantener la homeostasis fisiológica y anatómica, del cuerpo, y la mente, humana, o animal.
En el caso de la mente asociada su salud a los estados anímicos, la estabilidad emocional, es necesaria.
Para analizar el reino vegetal y poder encontrar estás cualidades en las plantas, se deben seguir estos principios orientadores siendo los que ayudan a realizar investigaciónes privadas o públicas sobre la farmacopea de las hierbas para encontrar los principios activos que se usan en los medicamentos que consumimos.
La relacion entre forma y cantidad debe respetarse en forma estricta y directamente proporcional a la afección o desviación del estado normal del organismo. En relación de 10 a 1, para la dosis a consumir.
Algunas terapias amplían aún más la proporcionalidad dependiendo de la dinamización atómica de la sustancia curativa, por ejemplo 100 a 1, 1000 a 1, 10000 a 1. Dado que en ella radica su potencia terapéutica.
Entonces recapitulando encontramos al menos tres principios básicos para orientarnos en la cura natural, el de similitud, sustancialidad y proporcionalidad.